En el "factor humano” se encuentra habitualmente la clave del éxito o el fracaso de muchas empresas. El desarrollo de nuestras civilizaciones ha ido de la mano con el desarrollo de quienes son los "creadores” de las innovaciones y los "fabricantes” de lo que producen: las personas.

Por ello las ideas sobre como gestionar las personas (los recursos humanos) de las empresas en particular, y de las organizaciones en general, han evolucionado constantemente.

La participación del las personas dejó de estar regida por la fuerza bruta característica de las sociedades esclavistas que construyeron las grandes civilizaciones del Oriente próximo y lejano, del Mediterráneo o de las Américas, también por la dominación servil de las sociedades medievales. La revolución industrial propició la aparición de un nuevo modo de producción y de empresas de gran tamaño, que requirieron nuevos métodos de gestión de los trabajadores en ellas encuadrados, apareciendo con los inicios de la "Administración Científica” los primeros manuales de gestión de los RRHH.

Éste desarrollo de ideas fue desde los primeros conceptos de gestión del "personal” que se centraban en las actividades de control del mismo, pasando por enfoques más globales que incluyeron la formación de los recursos humanos o la creación de oficinas de atención específicas, hasta llegar a la gestión de competencias o el énfasis en el desarrollo de las personas que forman parte de la empresa.

Así  aparecieron los primeros "Departamentos de Personal o de Recursos Humanos” donde se concentraban los procesos de gestión puramente administrativa (nóminas, control jornadas, licencias y vacaciones), dirigidos por "Directores de Personal o de Recursos Humanos”, que fueron creciendo integrando junto a esos procesos de control administrativo nuevos aspectos como los "Departamentos de Formación de RRHH” u "Oficinas de atención al empleado”, hasta llegar a la gestión de las competencias de los trabajadores o profesionales de esa organización, con la aparición de la Direcciones de desarrollo profesional  y la figura de la Dirección de Personas.

El detener la mirada en las personas que trabajan en una empresa no solamente es importante para los directivos ó técnicos que trabajen en estos departamentos de personal o de personas, sino que es clave en la gestión de una organización. No en vano podemos decir que la gestión (en general) es coordinar y motivar a las personas de una organización para conseguir las finalidades de ésta (Vicente Ortún).

Trataremos del desarrollo de las personas que trabajan en una empresa, del trabajo en equipo, de la comunicación y el liderazgo en las empresas, de los conflictos y los procesos de toma de decisiones, del clima y cultura de las organizaciones, del papel de los RRHH en la gestión e la calidad, de la gestión del conocimiento y de la salud laboral.

  • Profesor: Francisco Javier Martín Santos